Es habitual entre los no iniciados el considerar que la fotografía astronómica reviste una gran complejidad pero,afortunadamente,no siempre es así.Evidentemente,si lo que deseamos es fotografiar una galaxia.por cercana que sea,tendremos que contar con un telescopio que nos permita seguir el desplazamiento de los astros que pueblan la bóveda celeste,a fin de lograr una exposición lo suficientemente larga que nos proporcione una imagen aprovechable.Pero,si contamos solamente con una cámara digital,aunque no sea muy sofisticada,que nos permita exposiciones de 15 o 20 segundos,ya podemos realizar fotografías del cielo muy interesantes.Si montamos la cámara sobre un trípode y la apuntamos hacia cualquiera de las constelaciones visibles a simple vista,obtendremos imágenes con muchos más detalles que los que cabría imaginar.Y si aprovechamos las fechas en que se producen lluvias de estrellas,podemos tener, con estos sencillos medios,un recuerdo gráfico del acontecimiento.No dejéis de intentarlo,os sorprenderá el resultado.Como muestra,la fotografía adjunta de la constelación de Orión, tomada el pasado día 12 de Enero con un ambiente bastante húmedo y con la Luna en cuarto creciente oculta detrás de la casa.
viernes, 14 de enero de 2011
Astrofotografía sin complicaciones.
Es habitual entre los no iniciados el considerar que la fotografía astronómica reviste una gran complejidad pero,afortunadamente,no siempre es así.Evidentemente,si lo que deseamos es fotografiar una galaxia.por cercana que sea,tendremos que contar con un telescopio que nos permita seguir el desplazamiento de los astros que pueblan la bóveda celeste,a fin de lograr una exposición lo suficientemente larga que nos proporcione una imagen aprovechable.Pero,si contamos solamente con una cámara digital,aunque no sea muy sofisticada,que nos permita exposiciones de 15 o 20 segundos,ya podemos realizar fotografías del cielo muy interesantes.Si montamos la cámara sobre un trípode y la apuntamos hacia cualquiera de las constelaciones visibles a simple vista,obtendremos imágenes con muchos más detalles que los que cabría imaginar.Y si aprovechamos las fechas en que se producen lluvias de estrellas,podemos tener, con estos sencillos medios,un recuerdo gráfico del acontecimiento.No dejéis de intentarlo,os sorprenderá el resultado.Como muestra,la fotografía adjunta de la constelación de Orión, tomada el pasado día 12 de Enero con un ambiente bastante húmedo y con la Luna en cuarto creciente oculta detrás de la casa.
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Parece sencillo, Salva. Pero tú nos llevas ventaja: tienes un cielo despejado desde tu observatorio. La mayoría tenemos bloques que tapan nuestra visión del cielo nocturno por no hablar de las condiciones meteorológicas, que, en mi caso, siempre se alían para no proporcionar visibilidad en absoluto. Me seguiré conformando con las fotografías que tan amablemente compartes con nosotros. Y si en algún momento la suerte me sonríe... serás el primero en saberlo!
ResponderEliminarUn saludo.